junio 2023 Archivos
Él se afirmará y pastoreará su rebaño con el poder del Señor, con la majestad del nombre del Señor su Dios. Y permanecerán, porque en aquel tiempo Él será engrandecido hasta los confines de la tierra. Y El será nuestra paz.
Repréndeme, oh Señor, pero con justicia, no con tu ira, no sea que me reduzcas a nada.
¿Quién puede relatar los poderosos hechos del Señor, o expresar toda su alabanza?
El encontró* primero a su hermano Simón, y le dijo*: Hemos hallado al Mesías (que traducido quiere decir, Cristo). Entonces lo trajo a Jesús. Jesús mirándolo, dijo: Tú eres Simón, hijo de Juan; tú serás llamado Cefas (que quiere decir: Pedro).
Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, recibiréis la corona inmarcesible de gloria.
¡Ay del pastor inútil que abandona el rebaño! ¡Caiga la espada sobre su brazo y sobre su ojo derecho! Su brazo se secará por completo, y su ojo derecho totalmente se oscurecerá.
Busquen al Señor y su fortaleza; busquen su rostro continuamente.
Pero Él les dijo: También a las otras ciudades debo anunciar las buenas nuevas del reino de Dios, porque para esto yo he sido enviado.
Tesoros mal adquiridos no aprovechan, mas la justicia libra de la muerte.
Vengan, hijos, escuchenme; les enseñaré el temor del Señor.
A fin de que el nombre de nuestro Señor Jesús sea glorificado en ustedes, y ustedes en Él, conforme a la gracia de nuestro Dios y del Señor Jesucristo.
Jesús respondió: En verdad, en verdad te digo que el que no nace de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios.
Yo sé, oh Señor, que no depende del hombre su camino, ni de quien anda el dirigir sus pasos.
El principio de la sabiduría es el temor del Señor, y el conocimiento del Santo es inteligencia.
Oh Dios de mi alabanza, no calles. Porque contra mí han abierto su boca impía y engañosa; con lengua mentirosa han hablado contra mí.
Al desembarcar, Él vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas sin pastor; y comenzó a enseñarles muchas cosas.
Y el Dios de paz, que resucitó de entre los muertos a Jesús nuestro Señor, el gran Pastor de las ovejas mediante la sangre del pacto eterno, los haga aptos en toda obra buena para hacer su voluntad.
Y después de anunciar el evangelio a aquella ciudad y de hacer muchos discípulos, volvieron a Listra, a Iconio y a Antioquía, fortaleciendo los ánimos de los discípulos, exhortándolos a que perseveraran en la fe.
Antes exhórtense los unos a los otros cada día, mientras todavía se dice: Hoy; no sea que alguno de ustedes sea endurecido por el engaño del pecado.
Ponga el Señor, Dios de los espíritus de toda carne, un hombre sobre la congregación, que salga y entre delante de ellos, y que los haga salir y entrar a fin de que la congregación del Señor no sea como ovejas que no tienen pastor.
Yo soy el buen pastor; el buen pastor da su vida por las ovejas.
Por esta razón, también nosotros, desde el día que lo supimos, no hemos cesado de orar por ustedes y de rogar que sean llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría y comprensión espiritual.
En la transgresión de sus labios se enreda el malvado, pero el justo escapará del apuro.
Y él los pastoreó según la integridad de su corazón, y los guió con la destreza de sus manos.
Salva a tu pueblo y bendice a tu heredad, pastoréalos y llévalos para siempre.
Con este fin también nosotros oramos siempre por ustedes, para que nuestro Dios los considere dignos de su llamamiento y cumpla todo deseo de bondad y la obra de fe, con poder.
¿Cómo, pues, invocarán a aquel en quien no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?
Porque la sabiduría protege como el dinero protege; pero la ventaja del conocimiento es que la sabiduría preserva la vida de sus poseedores.
Por eso, estén preparados y usen su buen juicio. Pongan toda su esperanza en lo que Dios en su bondad les va a dar cuando Jesucristo aparezca.
Teniendo presente sin cesar delante de nuestro Dios y Padre su obra de fe, su trabajo de amor y la firmeza de su esperanza en nuestro Señor Jesucristo;