diciembre 2023 Archivos
Yo soy el Alfa y la Omega, dice el Señor Dios,el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.
Yo soy el Señor, ése es mi nombre; mi gloria a otro no daré, ni mi alabanza a imágenes talladas. He aquí, las cosas anteriores se han cumplido, y yo anuncio cosas nuevas; antes que sucedan, os las anuncio.
Porque donde hay celos y ambición personal, allí hay confusión y toda cosa mala.
Y a aquel que es poderoso para afirmarlos conforme a mi evangelio y a la predicación de Jesucristo... al único y sabio Dios, por medio de Jesucristo, sea la gloria para siempre. Amén.
Y el que suministra semilla al sembrador y pan para su alimento, suplirá y multiplicará vuestra sementera y aumentará la siega de vuestra justicia.
Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por Él.
Y el Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros, y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en El, no se pierda, mas tenga vida eterna.
En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios.
A los ricos de este mundo, mándales que hagan el bien, que sean ricos en buenas obras, generosos, dispuestos a compartir lo que tienen.
Y a su vez, Isaías dice: Retoñará la raíz de Isai, el que se levanta a regir a los gentiles; los gentiles pondrán en él su esperanza.
"Y tu Belén, tierra de Judá, de ningún modo eres la más pequeña entre los príncipes de Judá; porque de ti saldrá un gobernante que pastoreará a mi pueblo Israel".
Pero cuando vino la plenitud del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer, nacido bajo la ley, a fin de que redimiera a los que estaban bajo la ley, para que recibiéramos la adopción de hijos.
Gracia a ustedes y paz de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo, que se dio a sí mismo por nuestros pecados para librarnos de este presente siglo malo.
Oh Dios, tú conoces mi insensatez, y mis transgresiones no te son ocultas. ¡No se avergüencen de mí los que en ti esperan, oh Señor, Dios de los ejércitos! ¡No sean humillados por mí los que te buscan, oh Dios de Israel!
Pues por cuanto Él mismo fue tentado en el sufrimiento, es poderoso para socorrer a los que son tentados.
Por tanto, tenía que ser hecho semejante a sus hermanos en todo, a fin de que llegara a ser un misericordioso y fiel sumo sacerdote en las cosas que a Dios atañen, para hacer propiciación por los pecados del pueblo.
Con cántico alabaré el nombre de Dios, y con acción de gracias le exaltaré. Y esto agradará al Señor más que el sacrificio de un buey, o de un novillo con cuernos y pezuñas. Esto han visto los humildes y se alegran. Viva vuestro corazón, los que buscan a Dios.
Cuando siegues tu mies en tu campo y olvides alguna gavilla en el campo, no regresarás a recogerla; será para el forastero, para el huérfano y para la viuda, para que el Señor tu Dios te bendiga en toda obra de tus manos.
Y no escondas tu rostro de tu siervo, porque estoy en angustia; respóndeme pronto. Acércate a mi alma y redímela; por causa de mis enemigos, rescátame.
En Él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. Y la luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no la comprendieron.
No estén unidos en yugo desigual con los incrédulos, pues ¿qué asociación tienen la justicia y la iniquidad? ¿O qué comunión la luz con las tinieblas?
Porque todo el que hace lo malo odia la luz, y no viene a la luz para que sus acciones no sean expuestas. Pero el que practica la verdad viene a la luz, para que sus acciones sean manifestadas que han sido hechas en Dios.
Pero ustedes son linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido para posesión de Dios , a fin de que anuncien las virtudes de aquel que los llamó de las tinieblas a su luz admirable.
Luz resplandece en las tinieblas para el que es recto; El es clemente, compasivo y justo.
Jesús les habló otra vez, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.
Entre ustedes no debe haber ni un poco de inmoralidad sexual, o cualquier forma de impureza o de codicia, porque estas conductas son impropias para los santos de Dios.
Ustedes son la luz del mundo. Una ciudad situada sobre un monte no se puede ocultar.
Porque Él nos libró del dominio de las tinieblas y nos trasladó al reino de su Hijo amado.
Tú lo has visto, Señor, no calles; Señor, no estés lejos de mí. Despierta y levántate para mi defensa y para mi causa, Dios mío y Señor mío.
Los entendidos brillarán como el resplandor del firmamento, y los que guiaron a muchos a la justicia, como las estrellas, por siempre jamás.