Pensamientos sobre el Verso de Hoy
Cuando Jesús vino la primera vez, vino para revelar a Dios (Juan 1:18). A pesar de todo lo maravilloso, poderoso y lleno de gracia que fue durante su ministerio terrenal, no se reveló totalmente. Nuestra esperanza está atada a su regreso. Cuando venga está vez, no vendrá a revelar a Dios, sino a revelarse a sí mismo como el Señor Conquistador, el que viene sobre el caballo blanco. Toda rodilla se doblará. Tendremos la oportunidad de verlo como es en verdad, Emanuel en poder y gracia, triunfante en toda manera. Si ponemos nuestra confianza en la gracia de Jesús podremos estar listos para cuando él regrese y servirle como se debe. Podremos vivir bajo su liderazgo con obediencia y alabanza.
Mi oración
Dios Todopoderoso, anhelo el día de ver a Jesús cara a cara, viniendo con sus ángeles. Hasta ese momento, ligo mi corazón en esperanza a la gloria que Jesús compartirá en ese día. Dame el poder de vivir como alguien que sabe que Jesús me dará la victoria. Jesús, por tu nombre poderoso oro, Amén.