Pensamientos sobre el Verso de Hoy
¡Chst! Tengo un secreto. Cristo murió para librate de la culpa y el castigo de tus pecados. ¡Chst! No lo hizo solamente por ti; lo hizo por todos. Haz correr la voz.
Mi oración
Me asombra, Dios Todopoderoso y Padre Celestial, que ofrecerías tu regalo más precioso por algo tan feo como mis pecados. No puedo pensar en ninguna forma de repagarte, pero quiero agradecerte, compartiendo esta buena noticia con todos por quienes has hecho este sacrificio. En el nombre de Jesús, Amén.