Pensamientos sobre el Verso de Hoy
¿Con cuanto calor humano das la bienvenida a los que visitan tu iglesia? ¿Cuándo fue la última vez que invitaste a alguien nuevo de tu congregación a tu casa para cenar? Mientras algunos tienen como don la hospitalidad, todos debemos ser gente que reciben a los "nuevos" con los brazos y corazones abiertos. ¿Por qué no hacer un compromiso con uno mismo para conocer y dar una bienvenida cálida a un visitante cada semana? En un mundo frío e impersonal, podemos hacer una diferencia grande en la vida de los que están buscando un refugio en la gracia de Jesús y su gente.
Mi oración
Padre, ayúdame a mí y a mi congregación para poder abrirnos, dando la bienvenida a los que nos visitan o que son nuevos entre nosotros. Utilízanos para compartir tu gracia y hospitalidad. En el nombre de Jesús, Amén.