Pensamientos sobre el Verso de Hoy
Pedro nos recuerda en su primera carta, segundo capítulo que vivimos como testigos para "declarar las virtudes de aquel que nos llamó de la oscuridad a su luz maravillosa". Hemos visto y experimentado la obra salvadora de Dios. Somos los que anticipamos la salvación que aún nos traerá. ¿Cómo podemos estar amargados, pesimistas o desanimados? El mismo Dios que dejó la tumba vacía e hizo que Jesús resucitara es nuestro Dios. Él es fuerte para salvar. Él es nuestro Salvador.
Mi oración
Oh Dios Poderoso, confieso que fácilmente caigo en mi rutina diaria de olvidarme del gozo de tu salvación. Dame ojos renovados para ver y voz fuerte para hablar de tus obras gloriosas y poderosas. Creo que me llevas a la gloria; así que ayúdame a demostrar y compartir esta gloria con los que todavía no te conocen como Dios, Salvador y Rey. En el nombre de Jesucristo, mi Salvador, oro, Amén.